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en Envejecimiento
La humectación se ha vuelto uno de los pasos principales para el cuidado de la piel, pero ¿por qué es tan importante?
La humectación ayuda a mantener el agua al interior de nuestra piel, para que se vea sana e hidratada al exterior. Mantener nuestra piel hidratada ayuda a que la función de barrera protectora de la piel funcione adecuadamente. De esta forma, se protege las capas internas de nuestra piel de agresores externos como contaminación, químicos o factores ambientales.
La piel seca y deshidratada es uno de los problemas más comunes. Para algunos, se puede volver una condición crónica. Cuando tu piel se vuelve seca y deshidratada, comienza a ocasionar picor y a pelarse. Si además, comienzan a aparecer finas líneas y tu piel comienza a presentar grietas que sangran, puedes necesitar la ayuda de un dermatólogo.
Para la mayoría de las personas, la piel seca puede ser una condición temporal debido al clima o a cambios hormonales. Sólo se convierte en un problema más evidente con el paso de los años debido a la disminución de producción de grasas y lípidos naturales de la piel. Ello puede resultar en un colapso de la estructura de soporte al interior de la piel, lo cual causa que aparezcan signos de la edad como líneas de expresión o arrugas.
En efecto, la resequedad en la piel puede ocasionar la aparición prematura de signos de la edad. Mantener la piel hidratada desde adentro puede postergar la aparición de signos de la edad por fuera.